El pañuelo de bolsillo es un accesorio masculino que denota elegancia y refinamiento. Su uso en el atuendo de los hombres comenzó en el siglo XIX como una forma decorativa en la vestimenta de los caballeros más nobles.
Hoy en día, el pañuelo se lleva tanto en estilos formales como en los más informales. Son versátiles, se adaptan a cualquier tipo de chaqueta o de traje y, además, pueden colocarse de diversas maneras según el estilo que lleves. Los encontrarás en todo tipo de tejidos y colores.
Para empezar, la manera más clásica y formal de llevarlo es con forma cuadrada, plano.
Para ello, simplemente hay que doblar el lado izquierdo sobre el derecho, y de nuevo volver a doblar desde abajo hacia arriba hasta la medida que desees.
Un pico
Esta forma de colocar el pañuelo también es clásica e ideal para todo tipo de pañuelos.
Dobla el pañuelo por la mitad haciendo un triángulo. Dobla la esquina izquierda hacia adentro y haz lo mismo con la derecha. Coloca el pañuelo dentro del bolsillo de manera que solo asome la esquina superior.
Dos, tres y cuatro picos
Para looks más vistosos que busquen llamar la atención.
Dobla el pañuelo a la mitad formando un triángulo pero con las esquinas "desfasadas", es decir que no coincidan, lo que dará la aparición de los picos. Dobla las esquinas hacia adentro y mételo en el bolsillo abriendo las puntas para que queden separadas.
Casual o al aire
Para estilos más casuales y recomendado para pañuelos de seda.
Agarra con los dedos el pañuelo desde su centro y levántalo. Con la otra mano rodea el pañuelo estrechándolo de arriba hacia abajo. Dobla la punta e introdúcelo en el bolsillo de manera que quede irregular.
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